Del miedo y otros demonios.

Miedo de empezar de nuevo, de cero, sin nadie al lado, miedo de dejar atrás cosas, canciones y personas, miedo de olvidar, o peor miedo de recordar para toda la vida. Miedo a fracasar, miedo a perder, miedo a ser olvidada, miedo a conformarme o a no conformarme nunca. 

Miedo a tener miedo. 

Miedo a no ser suficiente, miedo a vivir con rencor, miedo a olvidar los rencores, miedo a no enfrentarte, miedo a sí hacerlo. Miedo a vivir dentro de mí, miedo a que me conozcan, miedo a que no les guste, miedo a perder(te).

Miedo a la oscuridad y a la plena luz. Miedo a ser débil, miedo a no serlo. Miedo a caer, y a no hacerlo. 

Miedo al vacío, miedo a mí misma, miedo a dejar de escucharme, miedo a dejar de hablarme, miedo a dejarme de lado, miedos, de esos que calan hondo y no se van tan deprisa, miedos, que vienen para quedarse por alguna temporada, miedos, que están presentes a cada día, miedos, de esos que les damos posponer como si fuera una alarma, y que en realidad nos esperan a la vuelta de la esquina, que nos quitan el sueño, el hambre y las ganas, miedos que por tontos que parezcan nos tiran hacia abajo y no nos deja levantarnos, que nos hace llorar y gritar de frustración, pero más allá del dolor que provocan nos hace dar cuenta que somos humanos, que el tener miedo es algo que todos tenemos, si bien no sea a lo mismo, todos tenemos miedos, que nos paralizan, y nos dejan sin habla, pero que esperamos que en algún momento decidan hacer las valijas e irse por un tiempo, y cuando por fin lo hagan, que nos den un tiempo para recobrar fuerzas, respirar y caminar, hasta que lleguemos a la próxima esquina, miedos que más que miedos son demonios.

Leave a comment